Día 5: Actividades y visita a Tarragona

¡Hola familias! Ya estoy de nuevo aquí para contaros más cosas sobre el Campus. 

Quinto día en Tarragona que comenzó con el despertar de los monitores a la hora de siempre, desayunamos para coger fuerzas para un intenso día de actividades y a recoger las habitaciones.

La mañana estuvo llena de deporte, mucho baloncesto, fútbol y voley. Taller de pulseras en multiactividad, baile con Paula y clases de inglés con Álvaro y Blanca. Una ducha rápida y a comer. 

Tiempo libre para echar la siesta o ir a la piscina. 

 

A las 4.30 vino a recoger el autobús para llevaros a visitar la ciudad de Tarragona. Nos hicimos fotos en el mirador y dimos un paseo por la Rambla Nova y la Plaza Imperial hasta el centro comercial. Muchas fotos de recuerdo en la ciudad que durante estos 10 días nos acoge. Sacamos a pasear a nuestro lindo gatito. Los monitores habían echado a suerte quien era el afortunado en colocarse ese traje tan fresquito y de repente salió un voluntario. Juanrra nos dijo que le hacía ilusión ponérselo y así fue. No sé si querrá repetir...

Sus compañeros se hicieron fotos con él y los más pequeños estaban emocionados y no se separaban del gato. Se enteraron que la mascota no tiene nombre y están pensando uno. 

En el Centro Comercial se desató la locura, compras, helados, cotilleo en las tiendas... más de uno ha hecho corto con el dinero que les habéis dado y a mitad del Campus no les queda casi nada... Aún estáis a tiempo de mandarles la tarjeta de crédito para que puedan seguir invirtiendo su dinero en helados y regalos para casa 😛

A las 8 vino a recogernos el bus para volver a la residencia. Antes de entrar sacamos a nuestros payasos justicieros para hacer inspección de materiales peligrosos, es decir, coca-cola y redbull para la noches. La verdad es que con estos chicos no hace falta pero se ha convertido en una tradición y nos reímos un rato. No triunfamos mucho.

Por la noche hicimos varios juegos en la plaza, las jarras y la bandera, así los cansamos un poquito más. Michelle, decidió coger el megáfono para explicar el juego y casi le hicieron más caso que a los monitores. Después tuvimos un ratito de cara B con más vídeos muy divertidos y no podíamos irnos a dormir sin discoteca. Además de las canciones y los bailes del Campus, convertimos el jardín en una verbena y sonaron canciones tradicionales que hasta los papás y mamás os lo habríais pasado pipa en la pista de baile. 

A dormir que otro gran día nos espera